FIESTAS DE LAS TARGELIAS/THARGELIAS.

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Hoy, día 7 de mayo, se celebraban las fiestas de las Targelia. Básicamente, un ritual de vegetación en el que se injertó un rito expiatorio, el festival lleva el nombre de los primeros frutos, o el primer pan del trigo nuevo "thargeles". Cuyos orígenes tenemos que remontarnos a la Atenas clásica, en la que se realizaban en honor a Apolo y Artemisa (Athen., X. p. 424) aunque según Aristófanes, (Equit., 1405), sería a Helios y Hora. Este tipo de ritual se siguió celebrando hasta principios del s. I d.C. en Grecia, aunque parece ser que desde los primeros momentos de la república romana se trasladó también a la P. Itálica.

Este ritual implicaba la muerte de un hombre y de una mujer o de dos hombres. Ambos eran considerados “chivos expiatorios” o “pharmakoi” (fármaco, curación, solución) de la ciudad, en época de calamidades, hambruna o pandemias. Estas “victima humanae” denominadas así en Roma, eran conducidas (haciendo el acto simbólico de expulsión del mal) fuera de la ciudad, cerca del mar, acompañados de una música producida por el aulós. Los hombres debían portar un collar con una ristra de higos negros, mientras que la mujer de higos blancos. Mientras iban andando hacia el exterior de la ciudad hasta donde fueran sacrificados, eran golpeados constantemente con varas de higueras y arrojándoles higos. Cuando llegaban al lugar del ritual eran alimentados con higos, pasteles y queso. Una vez terminado este “banquete” eran quemados vivos en una pira funeraria hecha con maderas de higuera salvaje, cuyas cenizas, de los fallecidos, eran esparcidas al aire y al mar, terminando así con el mal.

Las personas sacrificadas probablemente eran criminales condenados a muerte, que el Estado mantenía hasta este momento. En Grecia eran aquellos que estaban lisiados o personas que se ofrecían para esta celebración (Schol., Ad Aristoph. Ran. 733; Athen. IX. p.370).

El segundo día del festival, hubo una ofrenda de agradecimiento, una procesión y el registro oficial de personas adoptadas (puesto que en estas fiestas era costumbre adoptar a niños o niñas como propios hijos).